Los paramédicos intentan reanimar a Susan Farrell. Creen que tomó promicina y perdió la lotería 50/50 que la acompaña. Danny está seguro de que ella no disparó. Después de llegar al hospital con los paramédicos, las cosas se complican cuando todos los que rodean a Danny comienzan a morir. Garrity y otro agente del NTAC son enviados al hospital para evaluar la situación.