Los Donahue luchan contra el remolque, conducido por Collins y su hija Hanmei, para ganar posiciones en un estrecho camino rural. De pronto, el remolque atropella una criatura y los Donahue chocan contra ellos. Los vehículos se encuentran averiados en mitad de ninguna parte y, tras superar las hostilidades iniciales, los dos equipos trabajan juntos para intentar poner en funcionamiento sus medios de transporte. Lou y Ruby deben dirigirse a una granja cercana para pedir algunas piezas de repuesto. Obtienen lo que estaban buscando, pero a un alto precio.